Mensaje del Presidente
Los vaivenes políticos inciden directamente en la vida pública de nuestra nación, lamentablemente siempre están ahí. Ante tales circunstancias, los paraguayos deberíamos estar unidos y comprometidos por consolidar a un pais economicamente estable, a diferencia de varios vecinos latinoamericanos.
Ningún hecho de atropello al orden constitucional justifica la violencia, ni siquiera en defensa de la misma.
Frente a este panorama, recordamos desde nuestra organización que el periodismo juega un rol muy importante, tanto en la transmision de la informacion como en los profundos cambios sociales que podrían traer como consecuencia.
Estimados compañeros de la RAP, ésta situación debe hacernos reflexionar a todos los comunicadores a la hora de escribir o comentar temas que ahora forma parte en el debate público; la ética debe ser el principal fundamento del reporte de los hechos.
Planteemonos cuestionamientos recurrentes pero siempre oportunos sobre algunas cuestiones que forman parte de nuestra labor.
En primer lugar, está la verdad. ¿Qué es la verdad para el periodista? ¿Puede el periodista ser objetivo frente a determinados hechos que tienen distintas lecturas?
¡Sí, si puede! Con responsabilidad se debe escribir sobre los hechos y no sobre las personas, a menos que haya pruebas irrefutables que involucren nombres propios. La verdad será siempre el mejor aliado del periodismo serio, responsable y con peso en la opinión pública, valor que pregonamos desde nuestra organización.
Los oyentes o lectores valoran las noticias que se ciñen a la objetividad (léase verdad). Un comunicador que sabe lo que escribe, definitivamente tendrá siempre «seguidores» que cada día busquen sus notas para saber la verdad de los hechos.
En segundo término, está la ética periodística. No sólo basta conocer la verdad para difundirla, sino también para saber cómo decirla sin necesidad de manipular la información.
Si no se tiene la información veraz, mejor no mentir ni exagerar. Es preferible, «perder» una exclusividad pero luego difundirla, que publicarla y retractarse después.
Por cierto que la verdad es la base de la ética que trae consigo el respeto a las personas. Aún en el caso de tener las pruebas necesarias, se debe ceñir estrictamente a ella y no añadir, por presunción, otros cargos contra la persona o las instituciones.
No olvidemos que el periodismo es la más noble de las profesiones o el más vil de los oficios, según cómo se use. La construcción de una nueva sociedad paraguaya depende en gran parte del periodismo como institución rectora de la opinión pública.
Fermín Espinola, Presidente Red Activa Paraguay
